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jueves, 9 de enero de 2014

01. La verdadera vida. Victoria Gómez

 Cuando despertó estaba en un campo que le recordaba a su niñez:  una tierra inmensa llena de espigas doradas y amapolas rojas. El sol era cálido, de  primavera con una luz envolvente que tamizaba las figuras. Sentía el aire que movía ligeramente su cabello.
Él la estaba esperando y extendió su mano entrelazando sus dedos con los suyos, de forma natural, como si siempre hubieran estado unidos. Fueron caminando despacio hasta llegar a una gran casa, allí todos sus amigos y familia los recibieron. Celebraron un gran banquete compartiendo todo lo que había en la mesa y ella se sintió plena, feliz.
 Entonces todas las piezas del puzle encajaron, y todo lo que había vivido  tenía sentido porque ahora estaba en la otra vida, la duradera, la que es por toda la eternidad…

5 comentarios:

  1. Bonita manera de darle una explicación a la vida aunque veo que todos tus amigos y familiares ya estábamos en la otra esperándote, lo que significa que todos nosotros...
    Un fuerte abrazo

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  2. Cómo todo lo que vivimos nos lleva a la niñez y al sueño de la vida. ¿En que lado de la vida estamos?.
    Me gustó. Un abrazo

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  3. Me fascina tu cuento, Vicky. Es precioso, bellísimo. ¿Sabes? Yo escribí hace tiempo uno parecido, del momento de nacer... Transiciones y metamorfosis. Vivan las mariposas!! Felicidades por tu historia y un beso. Rocío

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  4. Bonito paisaje el que describes Vicky; aunque opino que es mejor no dejar para mañana lo que puedas disfrutar hoy... jijiji

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  5. Este relato es sensacional, Vicky. Bonita vida para un precioso "hasta luego".

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