Blog para enfermos, familiares, voluntarios y miembros de AdEla. El jurado valorará la historia, contenido, imaginación y creatividad y NO tendrá en cuenta la puntuación, ortografía ni formato, pues sabe las dificultades de algunos de vosotros para escribir. También puedes comentar microrrelatos ajenos con respeto y crítica positiva. Lee los microrrelatos publicados para que te anime a empezar. ¡Suerte!

miércoles, 30 de julio de 2014

05. Santa


Bodas de sangre

Cien años hace que se globalizó la guerra con armas de fuego. La Operación Alfombra Mágica en 1950 llevó a miles de emigrantes yemenitas a Israel, cerca de allí; los Palestinos sueñan con alfombras mágicas que los lleven lejos de Gaza.

Decisiones
           
Nació, amó y fue amado. Creció, amó. Amó, creció. Se reprodujo. Desamor, se fué, dolor, creció. Soledad, vegetar o amar y sufrir. Luchó en vez de rendirse. Cantó, lloró. Vivió, nadó. Decidió su futuro.

Lectura de verano

Unas vacaciones. Lejos de su variada y estúpida monotonía. Un libro al azar. Unas palabras, que unidas, son una radiografía panorámica del corazón. En la portada aparece su propio nombre. Entre sus páginas descubrió quien era él.

lunes, 14 de julio de 2014

04. Valentina Velázquez

Olvido

Quería olvidarte. Busqué  un rincón en la memoria donde no estuvieras, y me perdí.

Retorno

Pretendía que nuestro amor fuera nuevo cada día. Ahora anhelo que tu mirada perdida me reconozca, y nos eternice en el momento más bello del pasado.

Futuro

Papá dijo que su jefe era un chupa sangre y, desde entonces, sólo veo zombis. Empieza a darme miedo el futuro de la humanidad.


viernes, 11 de julio de 2014

03. Victoria Gómez

El amor de margarita

Me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere...me quiere.

El desamor

Estaban distanciados el uno del otro. Ella seguía en la luna.

El olvido

Para olvidar ahogaban sus penas en alcohol, hasta que aprendieron a nadar.


lunes, 7 de julio de 2014

¡Ganadores de miedo!

Si algo hemos aprendido en junio, es a distinguir entre el miedo y el susto. Y si algo ha quedado claro, es que vosotros sí que sabéis en qué se diferencian. Si impactante es la posibilidad de encontrar a un ser terrorífico en una noche oscura, peor es ver que tu vida se desmorona, que la hipoteca te devora, que las deudas se ensañan contigo y, además, que te quedas sin fuerzas para defenderte de todo ello.

Hemos leído el miedo real en el relato de Valentina y Antonio; el misterioso en el de Beatriz; el miedo vecinal en Santa y el onírico en el de Gloria, todos ellos excelentes ejemplos del tema del mes.

Pero con el que más se nos han puesto los pelos de punta, tal vez por ser el monstruo al que más tememos, es el microrrelato ganador de junio:

- Juan José García Alcañiz: Bestiario humano

Finalista:

- Santa: Chin-chin.

Solo me queda agradecer a los participantes habernos asustado, a los lectores que se repongan cuanto antes y a todos en general, que participen en la propuesta hiperbreve de este mes. Y lo más importante: ¡que paséis un feliz verano!



02. Antonio Nieto


Corazón joven

Ayer cumplí noventa y cinco: me preocupa la idea de que un día perderé la juventud.

La promesa

La última vez que me emborraché, prometí dejar de beber, pero todo el mundo sabe que en este país nadie cumple lo que promete.

El hipócrita

Todavía estoy por creerme una sola cosa de lo que he predicado toda mi vida.

01. Juan José García Alcañiz

Escapada

Querido Papá Noel ¿Tienes una plaza libre en tu trineo?

Memoria de harina

Primero fui semilla. Después espiga y ahora estoy en tu mesa.

El ciclo de la vida

Aquella noche el padre Amadeo se fue a la cama con más dudas que certezas.
Por la mañana había tenido un bautizo, por la tarde una boda  y por la noche ofició el funeral de su propia madre 

El pasaporte

Cuando conocí a Alicia,supe que tenía pasaporte al país de las maravillas.

martes, 1 de julio de 2014

Un julio hiperbreve

La hiperbrevedad

Este mes os proponemos otra forma de escribir: el microrrelato hiperbreve. Todos conocemos el de “El dinosaurio”, de Augusto Monterroso, uno de los precursores y más famoso,  pero no es el único. Hay un buen número de microrrelatos de una sola línea, o dos, tres a lo sumo. La característica común a todos ellos, es la  rapidez de la narración, la velocidad que produce sensación de inmediatez, de relámpago ante los ojos del lector. Son relatos vertiginosos, de ficción súbita.

Un ejemplo es el de Miguel Saiz Álvarez:

El globo
Mientras subía y subía, el globo lloraba al ver que se le escapaba el niño.

Para que practiquéis la hiperbrevedad, os dejamos unos consejos de David Lagmanovich, un erudito en el estudio de la minificción, para escribir microrrelatos hiperbreves:

Un título, que se supone significativo y orientador; un comienzo, generalmente in media res; un desarrollo, caracterizado por las nociones de concisión, simplicidad sintáctica y velocidad; y un final, que puede ser conclusivo o abierto.”

Podéis escribir todos los que queráis, del tema que os apetezca. Sólo tienen que ser breves, a ser posible, menos de 3 líneas. Es un ejercicio mental increíble y divertido, ya veréis. Soltad la imaginación y afinad el teclado, las sorpresas irán apareciendo solas, como por arte de magia. La única advertencia que os hago: cuidado, son un vicio y cualquier excusa es buena para soltar el microrrelato de turno.


Aquí tenéis más ejemplos y si queréis:

Prólogo bonsái (Augusto Monterroso)

Lo cierto es que el escritor de brevedades nada anhela más en el mundo que escribir interminablemente largos textos, largos textos en los que la imaginación no tenga que trabajar.

Carta del enamorado  (Juan José Millás)

Hay novelas que aun sin ser largas no logran comenzar de verdad hasta la página 50 o la 60. A algunas vidas les sucede lo mismo. Por eso no me he matado antes, señor juez.

Cruce (Arturo Pérez Reverte)
Cruzaba la calle cuando comprendió que no le importaba llegar al otro lado.

El hombre invisible (Gabriel Jiménez Emán)
Aquel hombre era invisible, pero nadie se percató de ello.

Cuento de horror (Juan José Arreola)
La mujer que amé se ha convertido en fantasma. Yo soy el lugar de sus apariciones.

La última cena (Ángel García Galiano)
El conde me ha invitado a su castillo. Naturalmente yo llevaré la bebida.

Después de la guerra (Alejandro Jodorowski)
El último ser humano vivo lanzó la última paletada de tierra sobre el último muerto. En ese instante mismo supo que era inmortal, porque la muerte sólo existe en la mirada del otro.

Ardiente (José de la Colina)
¿Quieres soplarme en este ojo? -me dijo ella-. Algo se me metió en él que me molesta. Le soplé en el ojo y vi su pupila encenderse como una brasa que acechara entre cenizas.

Misterios del tiempo (Alejandro Jodorowski)
Cuando el viajero miró hacia atrás y vio que el camino estaba intacto, se dio cuenta de que sus huellas no lo seguían, sino que lo precedían.

Ágrafa musulmana en papiro de oxyrrinco (Juan José Arreola)
Estabas a ras de tierra y no te vi. Tuve que cavar hasta el fondo de mí para encontrarte.

Preocupación. (Orlando Enrique Van Bredam)
—No se preocupe. Todo saldrá bien —dijo el Verdugo.
—Eso es lo que me preocupa —respondió el Condenado a muerte.

El harén de un tímido. (René Avilés Fabila)
Como temía decirles que no, opté por conservar a todas las mujeres que he amado.

Cuento de horror (Juan José Arreola)
La mujer que amé se ha convertido en fantasma. Yo soy el lugar de las apariciones.

La hormiga escritora. (David Lagmanovich)
Si una hormiga resultara escritora, ¿qué podría escribir sino minificción?

(Fuente: La extrema brevedad: microrrelatos de una y dos líneas. David Lagmanovich. Universidad Nacional de Tucumán)