06. Un beso naturalmente. Belén Molina

Lleva días vagando sin rumbo fijo entre árboles, en busca de un beso que cure su piel más bien pegajosa, que ya arrastra parte del bosque.
De pronto le sorprende una melodía, sigue el sonido y ¡ahí está! Lo ve en todo su esplendor, es alegre, canta, salta y le invita a acercarse.
Por fin lo ha encontrado, la bella salamandra se lanza hacia el sonriente arroyo que la envuelve con sus dedos húmedos y ella se sacude de todo lo que se le ha pegado en su viaje.
Se funden en un beso de vida.

05. El beso. Asdrúbal Salsamendi

El beso es una expresión múltiple que dos seres humanos hacen para demostrar distintos estados emocionales, que pueden ir desde el respeto más riguroso hasta el beso de Judas que dio a Jesús. De allí pongamos mucha atención cuando hablamos de besos en distantes regiones del mundo que si bien se les nombra igual se practica de una forma muy diferente. En ciertas regiones se oculta el realizar esa práctica en público por razones de pudor personal, otras por razones espirituales y sumisión de control. Cuando nos hacemos mayores el beso es una práctica habitual y necesaria. En fin que el beso es, probablemente, la forma más sutil y profunda de nuestro sentir. Nada lo sustituye y enciende el amor a niveles inesperados.

Ganadores felices

Marzo ha sido especial, ha sido un mes feliz. Gracias a vosotros hemos descubierto esos momentos que hacen que un día cualquiera sea el mejor de todos los tiempos. Cada uno ha expresado su modo de sentir, creer y comprender la felicidad. ¿Merece alguien distinguirse sobre los demás? Creemos que no. De todos hemos extraído una sabiduría que se nos ha quedado grabada en el corazón. Así que MILLONES DE GRACIAS, a todos y cada uno:

- Ana Cristina García: por enseñarnos que La importancia está en lo cotidiano y el núcleo de la vida, también.

- Valentina Velázquez: por esa poesía que se nos ha metido en el corazón hasta el punto de sentir cómo recorre nuestro ser en cada latido.

- Almudena Verdejo: por explicarnos qué es la felicidad, con esa sencillez y claridad con la que ella siempre regala su sabiduría.

- Asdrúbal Sasamendi: por recordarnos que deseo y felicidad van de la mano y se alimentan mutuamente. Y que más nos vale que coexistan siempre.

- Pilar Santos: por hablarnos de esas pequeñas cosas que construyen, ni más ni menos, que la felicidad: la paz interior, el amor sincero, una sonrisa infantil.... 

- Jesús Pulido, Belén Molina y Santa: por incluir a esos deliciosos seres que viven con nosotros y que tanta felicidad nos regalan.

A todos vosotros: GRACIAS de nuevo. Todo un regalo y una alegría contar con vosotros. No faltéis nunca.

04. El beso. Almudena Verdejo

El beso, el beso...Es algo especial, tan leve, ligero...Es una nueva brisa que te envuelve, te transporta, provoca la música en el interior de nuestro ser, con ese ritmo tan dulce que nos permite cerrar los ojos y ver el cielo. Es ese primer beso tan deseado, disfrutado e imposible de olvidar que se lleva en el corazón y su recuerdo nos hace sonreír y suspirar.

Nos sentimos siempre dispuestos a disfrutar de sus dulzores de padres, de hijos, familia, amigos y amantes...

Por si fuera poco. se han demostrado sus propiedades curativas: un beso a tiempo sana los males de la vida y es el mejor  bálsamo para aminorar las penas y celebrar las alegrías.

Besos de Paz para todos.

03. El beso de Ana. Antonio Nieto

Poco después de que el AVE saliera puntual de la estación de Córdoba hacia Madrid, Ana, una elegante señora cercana a los ochenta, se sentó frente a nosotros cargada de maletas, sorprendida que su reserva estuviera ocupada; los asientos libres solucionaron el problema hasta que, al pasar por Ciudad Real, el tren continuó sin detenerse. Fue entonces cuando la mujer se dio cuenta del error, sintiéndose desolada: sus hijos la esperaban en la estación manchega. 

Siempre había viajado con su marido hasta hacía tres meses y recordaba que, antes, la gente se bajaba del tren y tomaba otro vagón del mismo convoy para trasbordar. El moderno móvil que le acababan de comprar sus hijos tampoco le ayudaba, empeñada en apretar el botón verde de llamadas sin deslizarlo. El revisor le indicó que al llegar a Madrid debía hacer un número de “complicadas” diligencias. La acompañamos de un lado para otro explicando el suceso a gentes de uniforme desganados hasta, finalmente, dejarla en el tren. Nos dio un beso de agradecimiento y dijo que todo había cambiado, salvo los ángeles de la guarda: mi agnosticismo hizo un guiño y besé a mi mujer.

02. Añoranza. Valentina Velázquez

Añoranza

Sosegado el viento,

la noche llegó como un suspiro.

Amainó la lluvia,

y un tenue rojizo impregnó tu cara,

parecías una rosa encarnada

cubierta de rocío.

Deslicé mis dedos por tu cara mojada,

y cuando alcancé los labios,

temblabas.

Mi corazón te arropaba;

tus ojos ardían;

nuestras manos quemaban.

Te besé,

me besaste,

junto a una humeante chocolatería.

En el callejón seguía lloviendo,

y el luminoso rótulo nos inmortalizó

acariciando la llama de un sueño.

La pasión se apagó con el tiempo;

pero siempre me acompañó la luz,

el sabor, el olor, el deseo,

la humedad de mi primer beso.

01. La vida del beso. Pilar Santos Adrados

Sería un día de abril del siglo pasado cuando mis padres me dieron el primer beso, cuando nací. Besos de felicidad y amor de padres a la niña que viene a este mundo de luz, llorando, sin saber nada de besos. Besos que crecen y saben a gloria cuando el bebé junta sus labios para devolver el primer besito a mamá o papá.
Fui creciendo entre mimos y besos de familiares, de amigos de los amigos. Llegué a la edad donde no se es niña, ni mayor, digamos a la edad del pavo. La gente se besaba, nunca en la escuela nos enseñaron nada de besos, los más ancianos decían que eran mitos heredados.
Hoy quiero quitar el lacre de mi diario donde, en maltrechas páginas gastadas por el tiempo, se esconden cientos de recuerdos semiborrados entre tinta desteñida que me enseñó lo que es la vida del beso.
Besos del alma
Besos de amor al niño recién nacido
Besos de ilusión
Besos de pasión que fructifican en tierra fértil
Besos que beben del agua de la esperanza
Besos que unidos de la mano se envían a iconos o santos
Besos de consuelo
Besos convertidos en un océano de amor frustrados por la decepción del Tsunami que les arrastró
Besos que simbolizan tiempos vividos de amor y dolor
El Beso: Qué es sino una energía incolora, inodora como el aire,
que atrapa, que alegra, que se aleja, que decepciona.

Este abril, besos mil.

Este mes toca tirar, dar o recibir besos, de cualquier tipo: de Judas (beso de afecto que encubre traición); de paz (beso que se da en muestra de cariño y amistad); beso negro (práctica de estimulación sexual que consiste en besar el ano); volado (el que se da a distancia, con el gesto de los labios y un ademán de la mano); o podemos comernos  a besos a alguien (besarlo con repetición y vehemencia). Cada uno elige y da el que más le apetece.

La mayoría de las películas finalizan con el beso de amor, ese que, se supone, inicia una nueva vida que promete dicha y felicidad a raudales. No como lo que le pasó a Cenicienta en este microrrelato del maestro José María Merino: 

Ni colorín ni colorado

Cenicienta, que no era rencorosa, perdonó a la madrastra y a sus dos hijas y comenzó a recibirlas en Palacio. Las jóvenes no eran demasiado agraciadas, pero empezaron a tener mucha familiaridad con el príncipe y pronto los tres se hacían bromas, jugueteaban. A partir de unos días de verano especialmente favorables al marasmo, ambas hermanas tenían con el príncipe una intimidad que despertaba murmuraciones entre la servidumbre. El otoño siguiente, la madrastra y sus hijas ya se habían instalado en Palacio. La madrastra acabó ejerciendo una dirección despótica de los asuntos domésticos. Tres años más tarde, la princesa Cenicienta hizo público su malestar y su propósito de divorciarse, lo que acarreó graves consecuencias políticas. Cuando le cortaron la cabeza al príncipe, Cenicienta hacía ya tiempo que vivía con su madrina, retirada en el País de las Maravillas.

(Fuente: “La glorieta de los fugitivos”. Ed. Páginas de Espuma)