Suena el despertador y no quiere oírlo, no quiere dejar escapar el sueño, no quiere levantarse, no quiere enfrentarse a las horas que le esperan. Son antipáticas, tediosas, incómodas. Están llenas de atascos en la carretera, de jefes que exigen mucho y hacen poco, de compañeros de trabajo que hablan de todo lo que no le interesa, de monotonía estremecedora.
Y así, poco a poco y rebosante de miedo, abre los ojos y aterriza en el día. Se da cuenta de que es un día nuevo, limpio, recién planchado, preparado para recibirle. Se estira y grita “¡¿quién dijo miedo? Aquí estoy. No voy a ser yo quien te estropee!”
Y así, sin darse cuenta, el día le envuelve repleto de colores. En la carretera ve coches que nunca había visto, el jefe sugiere lo que debe hacer y los compañeros marcan el ritmo con su charla, mientras él piensa en montañas inaccesibles y en mares lejanos que le están esperando.
Y así, poco a poco y rebosante de miedo, abre los ojos y aterriza en el día. Se da cuenta de que es un día nuevo, limpio, recién planchado, preparado para recibirle. Se estira y grita “¡¿quién dijo miedo? Aquí estoy. No voy a ser yo quien te estropee!”
Y así, sin darse cuenta, el día le envuelve repleto de colores. En la carretera ve coches que nunca había visto, el jefe sugiere lo que debe hacer y los compañeros marcan el ritmo con su charla, mientras él piensa en montañas inaccesibles y en mares lejanos que le están esperando.
Uffff, cómo me recuerda tu relato a muchos de mis días. Pero esa es la actitud: enfrentarse sin miedo y con la capacidad de sorprendernos intacta. Gracias por tu delicioso y real relato. ¡Cuanto reconforta leer relatos que nos ayudan a conocernos mejor!
ResponderEliminarAfortunadamente nuestra imaginación y voluntad puede, al menos, intentar romper esos días tedios. En el fondo creo que nuestra actitud es la que marcará el que los días, los compañeros, el jefe sean de una manera u otra...Buen relato de realismo...
ResponderEliminarEn los tiempos que corren tener trabajo es un lujo 😳 Una pena que pasemos media vida buscando la forma de salir indemne de el... leyendo tus relatos por ejemplo 😈
ResponderEliminarGracias Rafa... ¡todo un piropo tu comentario!
EliminarUn beso grande!