Los amores imposibles
aparecen en el peor momento,
cuando ya no duelen las cicatrices
y puedes soñar a ser libre.
Aparecen, y se clavan en la piel,
como una flecha de Cronos sin rumbo.
Te llevan al momento mas feliz del verano,
cuando tumbados en la hierba
mirábamos las estrellas fugaces;
y en un castaño milenario
estrené una navaja;
pintando corazones en su tronco.
Como piratas que navegan en un árbol pirata,
conquistamos la primera juventud;
llenos de verde los ojos,
y lleno de olor a madera tu pelo;
te besé, dulce como la inocencia,
y el tiempo se detuvo.
Amor imposible
con tu perfecta sonrisa etrusca
en tu cara de mar de nácar;
dieciséis años un segundo atrás.
¿Quién puede resistirse a la primavera?
¿Cómo detener el tiempo
en el instante que conocí tu boca?
¿Cómo descongelar el recuerdo
de mis manos pintando tulipanes
en un cuerpo desnudo?
Maldita tormenta llena de balas en la madrugada.
¿Quién respira profundo a mi lado?
¿Quién soy reflejado en el espejo?
Alguien me pregunta. Y yo me respondo;
con la boca seca de tantos inviernos.
- No. Tú no eres ella, Tú no eres a quien yo sueño. -
Pues te has marcado un buen relato a ritmo de poesía.
ResponderEliminarSe capta la esencia del sentimiento. Y es muy evocador . Las descripciones están llenas de sensualidad. Gracias por acercarnos a una adolescencia ya lejana en el tiempo pero viva en el recuerdo.
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