Sabía que jugaba con la droga más hipnótica, adictiva y mortal…
La probó con once años, cuando el sexo más puro invade el pensamiento. Disfrutaba con la agitación que le provocaban los roces de piel en juegos como ‘El pañuelo’ o ‘Un balón prisionero’.
El verde infinito de las vacaciones en el norte, activaba la sangre del grupo de quinceañeros, que juntos veían las lagrimas de San Lorenzo en noches inolvidables.
La universidad fue un laboratorio de química donde tuvo su primera sobredosis. Pagó cara su inocencia cuando lo que parecían grandes incendios eran solo humo, sin carne a la brasa.
Llegaron los hijos y la apatía. Y lo que el matrimonio inmunizó; el divorcio dio barra libre… cursó masters insomnes de madrugadas en camas ajenas. Con la diplomatura de Eros en la mano, supo lo difícil que es la soledad.
Nada parece real, cuando alguien te deja con el síndrome de abstinencia y la piel tatuada con su nombre.
Se desintoxicó en soledad (hijos a parte) y encontró el camino de vuelta en el océano de libros donde flotaba como un iceberg.
Un febrero más; preparó su dosis letal a compartir. Un beso lento, lleno de rojo; su instinto de pantera cargó su mirada azul de dinamita y saltó a los labios de su presa.
Creo que son la dopamina,la adrenalina y la norepirefrina las drogas del amor que nos dejan ciego@s,loc@s y lel@s y las que se resisten a una desentoxicacion permanente.De las otras drogas entiendo menos. Me parece un estupendo relato.
ResponderEliminarJa ja ja… Si resulta que eres una Científica del corazón y del cuerpo...
ResponderEliminarya me dirás donde pasas consulta… Gracias por tu comentario
Bs
El amor nos deja ciegos y sordos, pero no podemos dejar de amar, menos mal. Me ha gustado, Rafa. Un abrazo.
ResponderEliminarQué buena esta historia de yonkis, Rafa.
ResponderEliminarComo no podía ser de otra manera, acaba con un chute, espero que fuera un buen viaje y no uno de esos que te deja tirada en un portal, que cada pico es un riesgo.
Hoooola que tiempos aquellos Valentina... si tenía pelo rizado y todo... con espinillas y hormonas... jejeje
ResponderEliminarBs
Gracias por tu comentario Alicia... este finde echan la 2ª parte de 50 sombras... yo diría sombrillas... pero me tengo que callar que estamos en horario infantil...
Ya que tenemos billete de vuelta... habrá que arriesgar no? Bs